jueves, 25 de abril de 2024

¿CÓMO ESTAMOS CONECTADOS?

 


¿CÓMO ESTAMOS CONECTADOS?

Hoy casi todos estamos conectados mediante telefonía móvil, internet… Según algunas encuestas, más del 90% de la población tiene un teléfono inteligente. Estar conectados nos permite realizar muchas acciones cotidianas: mantener el contacto con familiares y amigos, realizar operaciones bancarias, pagar en comercios, teletrabajar, acceder a la información, realizar gestiones en entidades públicas… Ya no nos podemos imaginar la vida sin estar conectados. Pero esa conexión continua también tiene desventajas: genera dependencia; se debilitan las relaciones sociales, que quedan reducidas a mensajes; cuando falta o falla esa conexión, dejamos de poder hacer muchas de esas gestiones; aumenta nuestra vulnerabilidad ante ciberdelincuentes; las personas que, por algún motivo, no tienen acceso a la tecnología quedan excluidas de la vida económica y social…

Jesús, en el Evangelio de este quinto domingo de Pascua, nos llama a descubrir la necesidad de estar conectados a él, y lo hace en el ejemplo de la vid y los sarmientos: la vid es la planta cuyo fruto es la uva, y consta de una capa o tronco de donde salen los sarmientos, unas ramas largas, donde brotan las hojas y los racimos.

Y, desde esta imagen, Jesús dice: «yo soy la verdadera vid, vosotros los sarmientos». Jesús es la verdadera vid, de quien brota la verdadera vid-a; para poder recibir esa vida, necesitamos estar conectado a él: “el que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante”.

Y nuestra conexión con Él no debe ser ocasional, sino contínua, porque igual que el sarmiento necesita estar conectado a la vid o , de lo contrario se seca, también a nosotros nos ocurre lo mismo cuando nos falta la conexión con Jesús o esta conexión es esporádica: “como el sarmiento no puede dar fruto por sí, sino permanece en la vid, así tampoco vosotros, sino permanecéis en mí; porque sin mí no podéis hacer nda”. Por eso, del mismo modo que sin estar conectados a internet apenas podemos llevar adelante nuestra vida diaria, sin estar conectados a Jesús nuestra vida cotidiana queda limitada a un pasar los días, sin una verdadera meta y esperanza, solo esperando el final. En cambio, si estamos conectados a Jesús de forma contínua daremos fruto abundante, porque estamos conectados a quien es la Vida y nuestra fe y nuestra vida van unidas, aunque a veces se nos olvida.

Al contrario que nos ocurre con estar conectados a internet, estar conectados continuamente a Jesús sólo nos aporta ventajas: no genera dependencia sino verdadera libertad para discernir y actuar; también fortalece nuestras relaciones sociales, porque están basadas en el mandamiento del amor, ‘como Él nos ha amado’; y nos hace fuertes para resistir a las tentaciones y amenazas que nos rodean; y, sobre todo, la conexión a Jesús está al alcance de todos, nadie queda excluido de ella, aunque a veces haya que ‘podar’, cortar con algo, para poder dar más fruto.

Pero claro, también hay problemas. Hay sarmientos secos por los que no circula la savia de Jesús. Discípulos que no dan frutos porque no corre por sus venas el Espíritu del resucitado. Comunidades cristianas que languidecen desconectadas de su persona. Por ello hace una afirmación cargada de intensidad: “el sarmiento no puede dar fruto si no permanece en la vid”, la vida de los discípulos es estéril si no permanecen en Jesús.

La forma en la que viven su religión muchos cristianos, sin la unión vital con Jesús, quedará reducida a un folclore que no aporta nada a la Buena Noticia del evangelio. La Igleisa no podrá llevar a cabo su misión en el mundo contemporáneo, si los que nos decimos cristianos no nos convertimos en discípulos de Jesús.

Ser cristiano, exige hoy experiencia vital de Jesucristo, un conocimiento interior de su persona y una pasión por su proyecto. Si no aprendemos a vivir de uncontacto más estrecho y apasionado por Jesús, la decadencia de nuestro cristianismo se puede convertir en una enfermedad mortal.

 

Hasta la próxima

Paco Mira


miércoles, 24 de abril de 2024

CATEQUESIS DE MATRIMONIO

DISTINTAS PAREJAS SE HAN REUNIDO EN LA PARROQUIA DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD DEL TABLERO PARA REALIZAR LA CATEQUESIS MATRIMONIAL QUE  DARÁ PASO A LA REALIZACIÓN DEL SACRAMENTO. ¡MUCHAS FELICIDADES! Y LO ¡QUE DIOS HA UNIDO QUE NO LO SEPARE EL HOMBRE!




 

sábado, 20 de abril de 2024

EUCARISTÍA DEL BUEN PASTOR

ORACIÓN DEL DOMINGO DEL BUEN PASTOR. HIGINIO

Escuela de formación sociopolítica y fe cristiana

 

Escuela de formación sociopolítica y fe cristiana 


El martes 23 de abril, a las 19:30 horas en la Casa de la Iglesia, la Escuela sociopolítica y fe cristiana celebra la séptima sesión de este curso.

El título: Trabajo digno y salud laboral, un derecho fundamental. Ganar el pan, cuidar la vida. 

El ponente: Miguel Cruz Santiago, presidente de AVAELA (Asociación de víctimas de accidentes y enfermedades laborales de Andalucía). 

La presentación y moderación estará a cargo de Genoveva Cedrés Díaz. 

En esta ocasión colabora con la Escuela el Secretariado de Pastoral del Trabajo de la Diócesis de Canarias.

Esta sesión es presencial, pero se podrá seguir también online en:

- Parroquia Virgen de la Vega, en Las Palmas de GC.

- Ateneo de Vecindario, en Santa Lucía, GC.

- Parroquia San Francisco Javier, en Arrecife, Lanzarote.

- Fundación Manuel Velázquez Cabrera, en Tiscamanita, Fuerteventura.

Podrá recibir el enlace enviando un correo a escuelasociopolitica.istic@gmail.com 

AGENDA 22 AL 28

 


viernes, 19 de abril de 2024

¿DE QUÉ PASTOR HABLAMOS?: DEMOS GRACIAS POR ELLOS



¿DE QUÉ PASTOR HABLAMOS?: DEMOS GRACIAS POR ELLOS

 

Este fin de semana tenemos por delante una de las definiciones más famosas que Jesús hace de sí mismo. Incluso creo que es una definición que a muchos cristianos no les gusta porque parece peyorativa. Es más, en nuestra sociedad del bienestar, cuando alguien nos quiere menospreciar por algo, se recurre al rebaño, a que somos como ovejas, que donde va la primera, la que tiene el cencerro, allí van las demás. No necesitamos que nadie nos gobierne y nos controle nuestra vida. No necesitamos ningún pastor.

Creo que los cristianos vivimos una relación bastante pobre con Jesús. Creo que no creemos que él cuida de nosotros y por ello necesitamos conocer una experiencia más viva y entrañable. Cuando el Papa Francisco dijo que quería pastores “que olieran a oveja”, la frase se ha hecho viral en todo el mundo. Cuando tenemos la imagen de un pastor que huele a sus animales, que incluso lo vemos embarrado como lo están sus animales, cuando en invierno y verano se levanta a las tres de la mañana o incluso duerme con ellos cuando alguno va a parir... el amor hacia ellos es el sustento de su vida, al margen de lo que económicamente le pueda reportar.

El pastor bueno se preocupa de sus ovejas, no las abandona nunca, no las olvida, vive pendiente de ellas, atento a las débiles y enfermas... no como el pastor mercenario cuando ve el peligro, lo primero que hace es salir corriendo, porque no le importan las ovejas. El pastor no puede vivir a su aire, alejado del olor que desprende el rebaño. Un olor que se impregna, sabe lo que necesita el mismo y por ello lo ama.

Toda la vida de Jesús es un misterio de amor y de entrega generosa, sin cobrar una nómina al final del mes. Solo en la fuerza de su amor es posible el amor entre las ovejas del rebaño. La comunidad evangelizadora es aquella que se dispone a acompañar a todas las ovejas, estén o no en el redil. Acompañar a la humanidad en todas sus situaciones de dolor y sufrimiento, también de gozo y alegría. 

Ser ese buen pastor que cuida del espacio que necesitan las ovejas para crecer, para madurar y para vivir. Ser ese pastor que se entrega no es fácil, pero siempre es más liviano si nos dejamos impregnar del olor de Cristo, nuestro Pastor.

El pastor bueno es el que da la vida por sus ovejas. El amor de Jesús no tiene límites, ama a los demás más que a sí mismo, que no huye del peligro, que cuando se pierde una, no dice ¡por una no me molesto!, sino que deja las 99 y va por la que estaba perdida, la echa al hombro y la vuelve a incorporar al rebaño. Por eso los primeros cristianos recitaban, “el Señor es mi Pastor, nada me falta”.

Probablemente, a lo largo de nuestra vida, hemos conocido muchos pastores por los que tenemos que dar gracias a Dios: nuestros padres, nuestros abuelos, algún médico que nos sirvió de consuelo, algún compañero que en un momento determinado de nuestra vida nos sirvió como muro de las lamentaciones, profesores que muchas veces más que conocimientos nos enseñaron testimonios y ganas de vivir.

También puede haber malos pastores. Aquellos que viven su trabajo solo por el salario sin importarle sus rebaños. Estos no huelen a oveja, no se embarran con ellas, sino que huelen a dinero, avaricia y explotación. Seguro que son de verborrea fácil, son de los que corrijen a los demás, porque no ven la viga que tienen en su ojo. 

Sepamos reconocer al buen pastor, al que nos cuida, quiere y mima. 

 

 

Hasta la próxima

Paco Mira

LECTURAS DEL IV DOMINGO DE PASCUA

 


LECTURAS DEL IV DOMINGO DE PASCUA

Primera Lectura

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles (4,8-12):

 En aquellos días, Pedro, lleno de Espíritu Santo, dijo: «Jefes del pueblo y ancianos: Porque le hemos hecho un favor a un enfermo, nos interrogáis hoy para averiguar qué poder ha curado a ese hombre; pues, quede bien claro a todos vosotros y a todo Israel que ha sido en nombre de Jesucristo Nazareno, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de entre los muertos; por su nombre, se presenta éste sano ante vosotros. Jesús es la piedra que desechasteis vosotros, los arquitectos, y que se ha convertido en piedra angular; ningún otro puede salvar; bajo el cielo, no se nos ha dado otro nombre que pueda salvarnos.»

 Palabra de Dios

 


Salmo

Sal 117,1.8-9.21-23.26.28-29

 

R/. La piedra que desecharon los arquitectos

es ahora la piedra angular

 

Dad gracias al Señor porque es bueno,

porque es eterna su misericordia.

Mejor es refugiarse en el Señor

que fiarse de los hombres,

mejor es refugiarse en el Señor

que fiarse de los jefes. R/.

 

Te doy gracias porque me escuchaste

y fuiste mi salvación.

La piedra que desecharon los arquitectos

es ahora la piedra angular.

Es el Señor quien lo ha hecho,

ha sido un milagro patente. R/.

 

Bendito el que viene en nombre del Señor,

os bendecimos desde la casa del Señor.

Tu eres mi Dios, te doy gracias;

Dios mío, yo te ensalzo.

Dad gracias al Señor porque es bueno,

porque es eterna su misericordia. R/.

                                                                              

Segunda Lectura

Lectura de la primera carta del apóstol san Juan (3,1-2):

 Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues ¡lo somos! El mundo no nos conoce porque no le conoció a él. Queridos, ahora somos hijos de Dios y aun no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es.

 Palabra de Dios

                                                                                  

Evangelio

Lectura del santo evangelio según san Juan (10,11-18):

 En aquel tiempo dijo Jesús: «Yo soy el buen Pastor. El buen pastor da la vida por las ovejas; el asalariado, que no es pastor ni dueño de las ovejas, ve venir al lobo, abandona las ovejas y huye; y el lobo hace estragos y las dispersa; y es que a un asalariado no le importan las ovejas. Yo soy el buen Pastor, que conozco a las mías y las mías me conocen, igual que el Padre me conoce y yo conozco al Padre; yo doy mi vida por las ovejas. Tengo, además, otras ovejas que no son de este redil; también a ésas las tengo que traer, y escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño, un solo Pastor. Por esto me ama el Padre, porque yo entrego mi vida para poder recuperarla. Nadie me la quita, sino que yo la entrego libremente. Tengo poder para entregarla y tengo poder para recuperarla: este mandato he recibido de mi Padre.»

 Palabra del Señor